El volcán Hunga
Tonga y la formación del tsunami.
El reino de Tonga es un país de
Oceanía con un área de 747 m2 que está formada por más de 177 isla de las cuales
36 están habitadas. Este archipiélago se sitúa en la frontera de las placas del
Pacífico y australiana. Las islas de origen volcánico son Ata, Ha’apai y Kao
que forman un arco volcánico. En este reino, se han registrado más de 35
erupciones, pero la más reciente es la del volcán submarino Hunga Tonga el 15
de enero del 2022.
La erupción lanzó una columna de ceniza
de hasta 20km de altura que se extendió concéntricamente a unos 130 km desde el
volcán. Unos 15 minutos después, la erupción derivó en la formación de un
tsunami que golpeó todo el reino de Tonga, las islas Fiyi y Samoa, Nueva
Zelanda, la costa oeste de Estados Unidos, Canadá, la costa del Pacífico de
Japón, donde se alcanzaron olas de 1,2 metros, aunque se prevén olas de hasta 3
metros. Estos tsunamis no son la consecuencia de un choque entre placas, sino que
son generados por ondas de choque atmosféricas y oceánicas acopladas durante una
explosión. Las olas registradas llegaron hasta metro y medio en la capital de
Tonga que consta de unos 24.500 habitantes aproximadamente. En Estados Unidos
se detectaron olas de más de un metro en California situada a 8.700 km de Tonga.
El gobierno de Tonga ha confirmado el fallecimiento de tres personas: una mujer
británica, una mujer de la isla Mango y un hombre de la isla Nomuka.
Las imágenes del satélite revelan
que como resultado de la erupción solo quedan dos porciones de tierra (parte del
cono volcánico) sobre el nivel del mar que días antes, eran más grandes y se
encontraban unidas por una lengua de terreno. La desaparición del volcán
dificulta el control de su actividad volcánica submarina. El riesgo de un segundo
tsunami sigue latente, pues el volcán consta de un historial extenso de
erupciones y una segunda erupción violenta provocaría la formación de otra atroz
marejada.
Actualmente, las autoridades de
Tonga han pedido a la población mantenerse alejados de la costa y el uso de
mascarilla para protegerse de la lluvia de ceniza; y han recibido ayuda de
Nueva Zelanda y Australia, quienes han enviados barcos cargados de suministros.
https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/ciencia/2022/01/15/61e27751fc6c8337768b45a7.html
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